ANEXO I: Post MorteN

Apreciados alumnos y seguidores, la primera etapa de consejos ha muerto, viva la segunda etapa de consejos. No queremos lloros, ni sollozos, ni desencantos; no desesperéis, porque hoy damos comienzo a un nuevo bloque de consejos: el contexto y la creación.

No podemos olvidar que cuando algo llega a su fin, aparece la inquietante figura de la muerte para certificar la desaparición. Por ello hemos decidido dedicarle, este primer ANEXO a la muerte, como colofón al primer bloque de consejos y como prologo a la segunda y más relevante parte del curso.

Como ejercicio para el complemento de tu formación, utiliza las siguientes palabras para rellenar los espacios de puntos que iras encontrando en este Anexo I. Mejorarás tu léxico y darás vida a palabras casi en desuso. (1) Perturbados,(2) Impostores, (3) Mierda...

La Parca, Calaca, Azrael …, bajo un montón de nombres y la misma mala uva, la muerte nos acompaña desde el mismo momento en que nacemos, seamos creadores o simples mortales. Decía Freud que “la muerte no es eso que está más allá de la vida, sino aquello que permanece indefectiblemente unida a ella”.

Aun asumida su existencia, la mayor parte de la sociedad le damos la espalda como si se tratarse de un evento que no va con nosotros. Camus en "El mito de Sísifo" nos describe así dicha situación "...nunca se asombrará demasiado ante el hecho de que todo el mundo viva como si nadie lo supiese".

Y aunque banalizamos con su nombre al decir que estamos cansadísimos o que estamos hartos de alguien o que hemos ganado una partida, la muerte nos aterroriza. ¿Será porque no la conocemos?, ¿será porque no conocemos lo que hay después?, ¿será por la liturgia de la despedida?, ¿será porque la emoción y el riesgo tienen un límite?, ¿será porque está relacionada con la decadencia, la enfermedad y el sefiní definitivo? …

Aun no habiendo respuesta cierta, existen grupos, personas y tribus que parecen vivir alejados de este temor generalizado. Excepciones:

. (1). Determinados gremios hacen alarde de su amor férreo por esta intangible dama y la convierten en himno coreado a paso ligero detrás de una cabra (leer con detenimiento el estribillo de esta canción) …

... Por ir a tu lado a verte,

mi más leal compañera,

me hice novio de la muerte,

la estreché con lazo fuerte

y su amor fue mi Bandera.

No es el lugar adecuado, ni el momento oportuno para hacer un comentario de texto o para analizar la calidad poética, pero lo cierto es que sobre dichos sujetos solo podemos decir que son unos _ _ _ _ _ _ _ _ _ _, nadie quiere a ese personaje de pareja formal y si no ¿porqué corren todo el dia aferrados a una escopeta?.

.(2). Personajes históricos, como Sor Teresa de Los Andes acababa uno de sus discursos visionarios diciendo “...Quiero ser hostia pura" . Expresiones parecidas las utilizo yo en el coche.

.(3). Por último mencionar a los Trausos. Nos cuenta Heródoto que ante un recién nacido se daban grandes lamentos, cantando los muchos males que le esperaban en el transcurso de la vida. Por el contrarío en la muerte de alguno de ellos, daban muestras de contento. En definitiva una tribu de _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _.

Retaule Major del Porc Destí


Olvidados los miedos y las excepciones, lo que nos ocupa de la muerte en este Anexo I, es que aun no siendo fotografiable, radiografiable, calibrable o diagramable, la muerte está representada por todas las disciplinas artísticas posibles. La pintura ha abusado de ella, la poesía ha llegado a la sobredosis, los escenarios de teatro están llenos de cadáveres y que podemos decir del cine, que siempre ha matado alegremente.

Just What Is It That Makes today’s death So Different, So Appealing? O dicho de otra manera ¿qué es lo que hace a la muerte de hoy en día tan diferente y tan atractiva?

Quizás la respuesta esté en lo inexplicable del hecho, en el fuerte carácter onírico impreso a lo largo de la historia, en lo atractivo de la iconografía creada alrededor del mito, en lo fantástico de la figura, en la pasión por lo desconocido, en los bonitos cadáveres o en las interminables malvas. El hecho es que la muerte, de la misma manera que nos acompaña desde que nacemos, forma parte del mundo de la creación desde que le mundo de la creación es mundo.

¿Tiene por tanto sentido obsesionarnos con una pregunta que no tiene respuesta?

La muerte es el único acto, desde que iniciamos nuestra andadura como seres vivos, que no requiere ejercer ningún esfuerzo. Nada está escrito en nuestro destino de forma más clara. Un día u otro moriremos. Por lo tanto te invitamos a creer en la oportunidad de vivir. Cabe preguntarse por tanto ¿por qué, el hombre, en la capacidad de ejercer su libertad creativa, puede usarla para ejecutar su propia muerte?, asume que muertos no crearemos nada más allá que mal olor.

El hombre no está educado para enfrentarse a la frustración y eso que vivimos en un transcurrir repleto de fracasos. Por ello olvidemos todas las preguntas, bueno, olvidemos las posibles respuestas. Convivamos con la realidad que supone saber que moriremos y utilicemos a la muerte como simple inspiración. Utilizar la muerte como modelo es tan lícito y nutritivo como escribir sobre pollos a last. Intentar profundizar en el más allá puede ser tan creativo o ruinoso como ser asiduo del Bingo.

…pero si definitivamente arrastrado por la insoportable levedad del ser, te ves empujado a un final cierto, si influenciado por frases como “vive rápido y deja bonito cadáver” decides dejarnos, si la atención mediática de tu obra creativa no es suficientemente apocalíptica y necesitas más y definitivamente optas por sortear tu futuro…

… ya lo sabes, la respuesta deberás encontrarla en tu interior.

Para despedirnos solo recordaros a Victor Hugo que comparó la muerte con la belleza, catalogándolas poéticamente con dos palabras: “La muerte y la belleza son terribles y fecundas”. Pero nosotros la adjetivamos con una sola: La muerte es una soberana _ _ _ _ _ _.

6 comentaris:

  1. ¡Uf, Ángel! demasiado profundo para leerlo de una sola vez. Volveré. Besos

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  2. Como si estubieses en tu blog, la puerta siempre esta abierta.

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  3. Sísifo encadenó a Tanatos, pero de eso a ser su novio. Ya decía yo que, detrás de tanto macho cabrío y con esos pasitos de pitiminí, se escondía la versión cabaretera de las locas de la caterva castrense y para colmo es el colofón (Requiescat in pace).

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  4. Hasta la cabra, que en todo este entuerto es la más cuerda, acabará así. Repito tu final (Requiescat in pace)...sniff

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  5. Vuelvo porque recordé una frase bellísima (la obviedad no le resta belleza) que seguramente conoces y que creo que es de César Vallejo (aquél de "Un hombre pasa con un pan al hombro..."):

    "Tanto amor y no poder nada contra muerte"

    Besos y sonrisas

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  6. Es cierto y aun así, seguimos sonriendo. Una necesidad o la obviedad de ser?
    Gracias de nuevo Virgi.

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